Ciencia y ONG trabajan para proteger y conservar tintoreras en la costa cartagenera

Los tiburones, representantes clave de las cadenas alimentarias en los océanos y mares del mundo, incluyen diversas especies, siendo varios de ellos considerados como súper depredadores. Sin embargo, también existen otros tiburones con comportamientos más tímidos, como es el caso de la tintorera (Prionace glauca).
La tintorera, al igual que otras especies de tiburones, tiene una amplia distribución global. Actualmente, se están realizando estudios en las costas de Cartagena mediante técnicas de marcaje y seguimiento. El objetivo principal es evitar que esta especie continúe en declive, especialmente ya que se ha constatado una disminución en el número de ejemplares en el mar Mediterráneo.
¿Qué pasa con la tintorera en el Mediterráneo?
Organizaciones como ICM-CSIC, WWF y ANSE están colaborando para mejorar el conocimiento sobre las especies pelágicas, en particular los tiburones mediterráneos, como la tintorera (Prionace glauca). Con estas investigaciones, se busca definir medidas que ayuden a mejorar el estado de sus poblaciones, dado que la especie se encuentra en estado crítico en el Mediterráneo.
Con la ayuda del palangrero de Cartagena Jubemar, se capturaron tres tintoreras de entre 1,85 y 2,5 metros de longitud, utilizando un aparejo tradicional para pesca de grandes peces pelágicos. Estas tintoreras fueron liberadas después de instalar dispositivos de seguimiento por satélite, en una operación rápida y sencilla. Gracias a la información proporcionada por estos dispositivos, los investigadores pueden mejorar el conocimiento sobre los movimientos de la especie en las aguas del Mediterráneo occidental.
La tintorera o tiburón azul (Prionace glauca) tiene un área de distribución muy amplia y está presente en casi todos los mares del planeta. Esta especie es principalmente pelágica, lo que significa que vive en mar abierto, alimentándose de peces y calamares. En ocasiones, se puede avistar en zonas costeras cercanas a playas y en aguas poco profundas.
Su población global está clasificada como ‘Casi Amenazada’, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). En el pasado, la tintorera era común en el Mar Mediterráneo, pero ha sufrido una importante presión pesquera, lo que ha llevado a su captura por barcos palangreros y marrajeros.
La progresiva reducción de sus poblaciones ha llevado a que la tintorera esté clasificada ‘en Peligro Crítico’ en estas aguas. Además, esta especie ha sido incluida en el Apéndice II de la Convención CITES, lo que significa que su comercio internacional está sujeto a controles por parte de las autoridades pertinentes.
A día de hoy, la situación de su población, sumada al escaso valor comercial de su carne, y la adopción de aparejos de pesca más selectivos ha reducido su presencia en las lonjas de pesca del litoral mediterráneo español.
Marcaje en Cartagena y posterior seguimiento
Identificar los riesgos asociados a la elevada presión pesquera sobre esta y otras especies de grandes tiburones pelágicos presentes en la región es uno de los objetivos del proyecto COTI, liderado por el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC). Este estudio se lleva a cabo en colaboración con la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través del Programa Pleamar, y está cofinanciado por la Unión Europea a través del FEMPA (Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y de Acuicultura).
La ONG que participa en el proyecto está desarrollando diversos proyectos de investigación y conservación de tiburones y rayas en el Mediterráneo y el estrecho de Gibraltar. El objetivo es mejorar el conocimiento de las especies de elasmobranquios más amenazadas y elaborar un plan para su seguimiento y conservación en el Mar de Alborán y Sureste Peninsular. Este trabajo se realiza de manera consensuada con el sector pesquero y otros actores, además de contar con el respaldo del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.
En conclusión, nunca debemos olvidar que todos vivimos en un enorme ecosistema que es la Tierra, en el que cada especie tiene su función particular. Por lo tanto, no se puede prescindir de ninguna especie si no queremos que se rompa el delicado equilibrio que nos une. Esta es una realidad que conocen los científicos, pescadores y técnicos, quienes trabajan en conjunto para preservar estas especies, como es el caso de la tintorera.